Nuevo trio de Italia para viajar desde Belgrado a Tokio
Cuatro sedes tuvieron como vencedores a extranjeros quedándose con el ticket a Japón una vez finalizada la semana de preolímpicos para definir los últimos cuatro cupos para Tokio 2020 (o 2021). Entre esos festejos estuvo la sorpresiva Italia, con renovación de jugadores, en la que destacó el triunvirato ofensivo Mannion-Fontecchio-Polonara que apunta a reaparecer dentro de un mes en su viaje a Japón.
Fase de grupos reducida
En la previa de la primera ronda, uno de los equipos clasificados quedaba eliminado por cuestiones sanitarias; Senegal tuvo casos positivos de coronavirus que no le permitieron viajar de su preparación en Alemania a Serbia, dónde se desarrollaba la competencia. A raíz de aquello, Puerto Rico e Italia recibieron los puntos de sus respectivos encuentros con el conjunto africano y aseguraron su puesto en la fase eliminatoria, por lo que solo tuvieron que enfrentarse entre sí para definir la primera y segunda posición. A pesar de haber arrancado perdiendo y llegar a estar 15 abajo, los italianos respondieron en la segunda mitad y se impusieron 90-83.
En cuanto a la zona B, todos los equipos pudieron participar en la competencia. Serbia partía con la ventaja de la localía, pero el poder que se esperaba del equipo no apareció en las primeras instancias. Primero le tocó el cruce contra República Dominicana, partido en el que las cosas estuvieran parejas durante los tres primeros cuartos, alternando por momentos la delantera. Sin embargo, la rebeldía dominicana no aguantó hasta el último y fue victoria para los serbios 94 a 76.
Al día siguiente llegó el turno de Filipinas contra los europeos. Ante la diferencia de nivel que estos últimos estimaron, se dieron el lujo de sentar a jugadores importantes como Nemanja Bjelica, Nikola Kalinic y Vasilije Micic. Si bien a priori parecía que esa diferencia se efectivizaba en el juego, Kakou Kouame empezó a anular a Boban Marjanovic y la distancia se fue recortando hasta el punto que los asiáticos pasaron a la delantera a falta de tres minutos. No obstante, Serbia presionó el acelerador en esos instantes finales para sellar el 83-76 definitivo.
Ya definida la punta, los dos derrotados se disputaron el otro puesto clasificatorio. El cortejo parecía más parejo de lo esperado en un comienzo, con defensas poco presentes, bastantes pérdidas y un muy buen porcentaje de acierto por parte de Filipinas que lo posicionaba por delante al entretiempo. Sin embargo, los centroamericanos ajustaron sus errores y apoyaron su experiencia sobre sus jóvenes rivales para llegar a 20 puntos de ventaja en el complemento. Así, el resultado fue 67-94 con el partido roto a falta de siete minutos para el final con los asiáticos arrastrándose lastimosamente.
Ronda eliminatoria
Definidas las posiciones en cada zona, los continentes europeo y americano quedaron enfrentados nuevamente en cada semifinal. Por un lado, Italia se llevó una victoria más que contundente contra República Dominicana por 79-59. La diferencia se abrió ya en el primer cuarto y fue extendiéndose hasta 32 puntos entrando al último. A pesar de la intensa defensiva dominicana, los tanos tuvieron una espectacular jornada desde el perímetro para eliminar cualquier tipo de esperanza rival (53% en triples contra 16%).
Un poco distinto fue el desenlace de la otra llave. El resultado estuvo cerca de esa diferencia de 20 tantos a favor del lado oriental del Océano Atlántico (102-84), con dos ofensivas altamente productivas y efectivas. Serbia supo crear esa ventaja a través de ataques rápidos en el tramo en que ambos estaban imprecisos y sostenerla defensivamente en los últimos 10 minutos. Puerto Rico estuvo muy cerca de recortar ese margen al comenzar la segunda mitad, pero la infracción de Isaiah Piñeiro al concluir el tercer cuarto dio tres libres que fueron cruciales para que se mantuviera todo en orden.
La ansiada final entre países del viejo continente tuvo un resultado que a priori podría haber sido inesperado, pero que tomando el desarrollo de la competencia y del enfrentamiento entre sí puede considerarse lógico. Los italianos mantuvieron una constancia ofensiva en los tres partidos y explotaron las dificultades defensivas de Boban Marjanovic con un quinteto abierto que aniquiló el aro serbio a base de triples. Estos llovieron en los dos cuartos intermedios, en los que Italia quedó por delante por 24 unidades con su trío on-fire. En los últimos minutos apareció Filip Petrusev (22 puntos) para ayudar al inspirado Danilo Andjusic (27 puntos) a recortar el diferencial, pero no fue suficiente para evitar el 95-102 final que tuvo la alegría tana como festejo.
La consagración de la nueva Italia
Muchas dudas habían surgido en la previa con las bajas de Marco Belinelli y Luigi Datome, dos jugadores de gran recorrido que decidieron descansar después de la temporada en vez de buscar la clasificación. A ellas se sumaba la ausencia de Danilo Gallinari, disputando las finales de conferencia del Este en la NBA con los Atlanta Hawks. Los cambios suelen ser difíciles de realizar con figuras de semejante talla, pero en este caso fueron para beneficio de los italianos.
La vuelta a Juegos Olímpicos después de 17 años tuvo a tres figuras estelares desde el primer partido. En primera instancia, el consagrado MVP de la competencia, Achille Polonara. El ala-pivot llegaba de ganar progresivamente protagonismo en el Baskonia y demostró ese crecimiento. Sumó más de 20 puntos y 10 rebotes contra Puerto Rico y Serbia, destacando con una espectacular efectividad en lanzamientos con más de 60% tanto en tiros de campo como en triples (69% y 61% respectivamente).
Rendimiento similar fue el de Simone Fontecchio, alero del ALBA Berlín, que también podría haberse quedado con la distinción individual del torneo. Promedió más puntos que su compañero (en parte por disputar más minutos contra República Dominicana) y fue la otra herramienta principal ofensiva de la rotación. Mantuvo peores rendimientos, pero sus tiros más exigidos fueron importantísimos para las tres victorias en el preolímpico.
La última estrella tuvo que ganarse su camino a base del juego a causa de su juventud, pero fue esa misma energía y rebeldía la que le permitió ganarse la titularidad en la final. Ese fue el caso de Nicolo Mannion, el joven de 20 años drafteado por los Golden State Warriors en el Draft del 2020, que probablemente fue el más dinámico de toda la competencia. Con menor efectividad por tener mayor volumen de tiros, tuvo rendimientos parecidos a Polonara pero aportando también desde la organización de la ofensiva.
Después de ellos, el mejor actor de reparto fue el alero Stefano Tonut, aportando un poco en cada apartado para acompañar a esos tres pilares. El resto de los compañeros fueron apoyando desde distintos puntos hasta conseguir la victoria en la final que les dio el pasaje directo a Tokio.
Probablemente los puntos más bajos de la plantilla fueron Nicolo Melli y Marco Spissu. El pivot tuvo el mismo flojo rendimiento que en su última temporada en la NBA con bajísimos porcentajes de tiro, aunque por lo menos estuvo firme para defender a Boban Marjanovic en el partido definitorio, mientras que el base de 26 años empezó como titular y fue perdiendo lentamente minutos con los jóvenes Mannion y Alessandro Pajola hasta el punto de quedarse en el banquillo todo el partido contra Serbia.
Los demás equipos
Serbia
Si bien eran candidatos como locales, el panorama no era para nada ideal con las ausencias NBA de Nikola Jokic por decisión personal y de Bogdan Bogdanovic por estar disputando las finales de conferencia del Este (también con los Hawks). Las dudas surgieron desde el primer momento con el partido sorpresivamente parejo contra República Dominicana y sus mayores ventajas estuvieron en fase de grupos con Boban Marjanovic en cancha. Cuando este fue anulado en la eliminatoria, pudieron imponerse con lo justo en las semis y finalmente cayeron en la final.
El punto más alto del equipo fue el joven pivot Filip Petrusev de 21 años, con un buen rendimiento constante a lo largo de todos los partidos sin tener demasiados minutos en cancha ni protagonismo. Promedió 15.5 puntos, 5 rebotes y culminó con el mejor +/- de los jugadores con asistencia perfecta, todo eso con menos de 20 minutos por partido. Después, fueron varios los que tuvieron rendimientos medianamente parejos, como Vasilije Micic y Danilo Andjusic, pero no suficientemente sólidos como para dar el paso al frente.
Como otro condimento extra, las salud de los serbios también tuvo su efecto en la semana preolímpica. Primero, Nikola Kalinic se ausentó desde el primer encuentro hasta la final por un golpe y luego Stefan Jovic sufrió una lesión muscular contra Filipinas que lo dejará más de un mes afuera de actividades deportivas. A esto se le puede agregar el muy bajo rendimiento de Milos Teodosic, histórico base del seleccionado, que sus aportes fueron pocos consistentes más allá de la creación del juego, sobre todo en el partido que terminó siendo definitivo.
Puerto Rico
Siguiendo la corriente de los finalistas, la inestabilidad ya se hacía presente en la previa boricua tras las declaraciones en febrero de Juan José Barea planteando como necesario un cambio de entrenador principal del seleccionado, alegando que el ciclo de Eddie Casiano ya estaba cumplido. Como consecuencia, tanto él como Ramón Clemente, Javier Mojica y Ángel Rodríguez renunciaron a la selección. A ellos, se sumó la sorpresiva negativa de Shabazz Napier, quien había participado en la última ventana FIBA.
En apenas dos partidos no pudieron desplegar demasiado. El base Gary Browne sufrió en varios momentos salvo para organizar el ataque (tuvo 26 asistencias en total), Gian Clavell fue el más constante en cuanto anotación y Isiah Pineiro tuvo un partidazo contra Serbia a pesar del pecado de la falta al final del tercer cuarto. De todas maneras, defensivamente sufrieron mucho, principalmente en la zona interior.
República Dominicana
Los dominicanos no fueron la excepción a las ausencias importantes, y no contaron ni con Ángel Delgado ni Eloy Vargas. Los dos internos de jerarquía se mantuvieron fuera por motivos personales (pasar tiempo con su hijo recién nacido) y recuperación de la lesión en su rodilla respectivamente. En este contexto, Víctor Liz, Gelvis Solano y Michael Torres Cuevas tuvieron buenos partidos en fase de grupo, liderando la anotación, pero se vieron ampliamente superados por Italia en la siguiente ronda.
Filipinas
El más débil del torneo llegaba con el objetivo de brindar experiencias a sus jugadores, siendo que casi todos participan en la liga universitaria de su país natal. Fuera de este grupo estaban Jordan Heading, nacido en Australia y naturalizado, que con 25 años demostró su experiencia liderando la anotación del equipo, y Kai Zachary Sotto. Este último era prospecto NBA de cuatro estrellas para el Draft de 2021, había firmado contrato con Team Ignite y terminó desvinculándose para poder jugar con su selección, por lo que tendrá la oportunidad de presentarse al Draft el próximo año. Aún así, el joven pivot no tuvo una buena participación en el torneo y sufrió mucho la diferencia física contra sus pares rivales.
Grupos definidos
Con las clasificaciones de República Checa (Victoria), Eslovenia (Kaunas), Alemania (Split) e Italia (Belgrado), todos equipos europeos y ninguno de los locales, se completaron los enigmas de la fase de grupos del torneo masculino de Tokio 2020. Estados Unidos, el máximo candidato con diferencia y defensor del oro x3, lidera el grupo A que también integran Francia, verdugo del Team USA en China 2019, República Checa e Irán. El grupo B, a priori el más accesible, está compuesto por Australia, Nigeria, Alemania e Italia. Finalmente, el grupo C se complejizó con la presencia de Eslovenia, vigente campeón europeo, dado que ya contaba con España y Argentina, finalistas del último Mundial, y Japón, el local.
Los italianos jugarán cada tres días hasta completar la primera ronda y abrirán el grupo B enfrentando a Alemania en el segundo partido de la competencia el próximo 25 de julio.

*Imágenes vía FIBA.