LeBron James: El camino hacia la eternidad #
Del regreso a casa al campeonato más épico de la historia
Con el título de los Lakers ya consumado —el cuarto en la carrera de LeBron James—, es el momento ideal para repasar el inolvidable recorrido que hizo “El Rey” para conquistar su tercer anillo, en 2016. Lo logró en su casa, Cleveland, a donde volvió con una promesa: darle a la franquicia su primer campeonato. Y cumplió, apenas en su segunda temporada.
La caída con Miami, la vuelta a casa y una primera decepción
En la temporada 2013-14, los Miami Heat de LeBron llegaron a su cuarta final consecutiva, pero fueron arrasados 4-1 por los San Antonio Spurs. Con solo 22 años, Kawhi Leonard fue el encargado de marcar a James con sorprendente eficacia.
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Ese verano, LeBron optó por regresar a Ohio. Allí lo esperaba Kyrie Irving, ya una joven estrella, además de dos primeras selecciones del draft: Anthony Bennett (decepcionante) y Andrew Wiggins. Ambos fueron traspasados a Minnesota a cambio de Kevin Love, formando así un prometedor Big Three.
En los Playoffs 2015, los Cavs superaron a Boston, Chicago y Atlanta, pero llegaron a las Finales sin Love (lesionado) y perdieron a Irving en el primer partido ante Golden State. Aun así, se adelantaron 2-1. Pero los Warriors ganaron tres seguidos y se coronaron campeones.
2015-16: La temporada que lo cambió todo
Motivados por la derrota anterior, los Cavaliers mantuvieron su núcleo y sumaron veteranos como Richard Jefferson y Channing Frye. La temporada comenzó sin Irving, que recién volvió en diciembre. A pesar de liderar el Este, el equipo tomó una decisión sorpresiva: despidieron al entrenador David Blatt y lo reemplazaron con Tyronn Lue. Se hablaba de una mala relación con LeBron, quien parecía tener más peso que el propio técnico.
Los Cavs cerraron la fase regular con 57 victorias. LeBron, con 25.3 puntos, 7.4 rebotes y 6.8 asistencias, fue tercero en la votación al MVP. Irving y Love, en cambio, no fueron al All-Star.
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Primera ronda: Barrida ante Detroit
Detroit, con un quinteto equilibrado y Andre Drummond como figura, presentó batalla. Aun así, Cleveland barrió la serie 4-0, destacándose Irving (31 puntos en el juego 1), Love (28) y un LeBron siempre constante. Cada encuentro fue más reñido de lo esperado, pero los Cavaliers impusieron su jerarquía.
Semifinales del Este: Otra barrida, esta vez a Atlanta
El mismo rival que en las finales del Este del año anterior. Convirtieron la serie en una paliza: 4-0. LeBron, Irving y Love dominaron en todos los partidos. Channing Frye brilló con 27 puntos en el tercer juego. En el cuarto, un ajustado 100-99 selló la barrida. Kevin Love fue el máximo anotador con 27 puntos.
Final del Este: Toronto resiste, pero cae 4-2
Toronto llegaba tras dos series a siete juegos. Sin Valanciunas (lesionado), pero con un encendido Biyombo, complicaron más de lo previsto. Cleveland ganó fácilmente los dos primeros partidos, pero cayó en Canadá. En el juego 5, los Cavs aplastaron por 38 puntos y en el sexto volvieron a ganar con otra actuación histórica de LeBron e Irving.
Finales NBA: El regreso frente a Golden State
Los Warriors eran el rival a vencer. Venían de una temporada récord: 73-9. Steph Curry, Klay Thompson, Draymond Green y compañía eran imparables. Golden State ganó los dos primeros juegos con facilidad. El segundo fue una humillación: 110-77.
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Pero los Cavs no se rindieron. En el juego 3, LeBron (32 puntos) e Irving (30) lideraron una gran victoria. Sin embargo, en el cuarto, Curry explotó con 38 puntos y los Warriors se pusieron 3-1. Parecía sentencia definitiva.
Pero una suspensión a Draymond Green y la lesión de Bogut cambiaron la serie.
La remontada imposible: 3-1 no era suficiente
El juego 5 fue el inicio de lo impensado: LeBron e Irving anotaron 41 puntos cada uno. En el sexto, LeBron repitió los 41 y forzó un séptimo partido en Oakland.
Game 7: El partido más importante del siglo XXI
El encuentro fue tenso, parejo y cargado de historia. Draymond Green tuvo su mejor actuación (35 puntos), pero no fue suficiente. En los minutos finales, llegaron tres jugadas eternas:
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- “The Block”: LeBron voló y le tapó una bandeja a Iguodala.
- “The Shot”: Kyrie anotó un triple monumental sobre Curry.
- “The Stop”: Kevin Love defendió a Curry como nunca antes.
Los Cavs ganaron 93-89 y lograron la primera remontada de 1-3 en una final. LeBron terminó con un triple-doble (27-11-11) y fue nombrado MVP.
Legado eterno
LeBron lideró en los cinco rubros estadísticos de las finales y cumplió su promesa: darle a Cleveland su primer título. Luego regresaría a dos finales más con los Cavs, cayendo ante los Warriors de Durant.
En 2018, cambiaría de conferencia y ficharía por los Lakers, donde conquistó su cuarto anillo en 2020, igualando a los Celtics con 17 campeonatos. Un título que también sirvió como homenaje a Kobe Bryant.
Originalmente, esta nota se iba a titular “No hay cuatro sin tres”. Hoy, con los cuatro anillos consumados, podemos decir con certeza que así fue.
