Donnie Nelson demanda a los Dallas Mavericks

Donnie Nelson, hijo del ex-entrenador Don Nelson, se desempeñó como general manager de los Dallas Mavericks por más de 15 años, donde anteriormente había sido asistente de su padre, quien dejó de coachearlos en 2005. Pero su historia con los Mavs no terminó de la mejor forma. Nelson no renovó su contrato en la última postemporada, después de que Dallas no consiga pasar la primera ronda de Playoffs por décimo año consecutivo con él a la cabeza en las oficinas.

Diciéndolo así, podría decirse que la decisión de Mark Cuban, dueño de los Mavs, fue lógica deportivamente hablando. Pero más allá de cualquier opinión basquetbolística sobre el primer GM campeón de la NBA en la ciudad texana, es necesario entender que hay un trasfondo mucho más grave en su salida.

Donnie Nelson como coach asistente de su padre, Don Nelson, que fue entrenador de los Mavs de 1998 a 2005.

Todo salió a la luz en un artículo de ESPN la semana pasada, donde se comenta que Nelson denunció a los Dallas Mavericks por despedirlo en represalia a no querer ignorar un caso de abuso sexual protagonizado por un empleado importante de la franquicia. El acusado se llama Jason Lutin, jefe de staff del equipo y mano derecha del dueño Cuban, y es acusado de abusar sexualmente del sobrino de Nelson en un encuentro laboral en un hotel de Chicago, en lo que fueron las vísperas del All-Star 2020. Además, Donnie acusa al propio Mark Cuban de ofrecerle 52 millones de dólares a cambio de que permanezca callado, en lo que sería un soborno para dar protección a Lutin.

La franquicia respondió de forma oficial negando absolutamente los hechos, acusando a Nelson judicialmente por extorsión, y aclarando las razones por las que al ex directivo no se le había renovado su contrato (todas ellas ajenas a esta cuestión). Dicho sea de paso, el artículo mencionado anteriormente también habla de una supuesta oferta de renovación por 10 años que Nelson estaba por aceptar hasta que la negociación habría sido echada para atrás por Cuban al no tener como garantía el silencio absoluto de su GM acerca de este tema. Sí, leyeron bien, Nelson habría pensado en renovar aún sabiendo lo que había pasado con su sobrino y siendo consciente de que pretendían callarlo a cambio de dinero.

El comunicado oficial de los Dallas Mavericks.

La única verdad en toda esta historia es que las acusaciones de ambas partes por ahora no son más que eso, y nadie es culpable de nada de lo mencionado hasta que haya una comprobación oficial. No es el primer escándalo de este tipo en el que está involucrada la franquicia texana, aunque todo parecía haberse calmado en Dallas después de los supuestos cambios de políticas realizados por Cuban hace algunos años. Esto había ocurrido después de que múltiples trabajadoras del equipo acusaran acosos de esta índole y un clima de trabajo hostil para las mujeres. Esta historia será muy larga y seguramente falte mucho tiempo para conocer una verdad.